Constituidos como una réplica del Consejo Deliberante, el Parlamento Juvenil, de San Martín, Provincia de Buenos Aires, llevó al encuentro los diversos proyectos que fueron desarrollando desde su conformación, el año pasado. “El espacio está integrado por estudiantes de último año del secundario”, cuenta Cristina.
Para desarrollar el trabajo, el Parlamento Juvenil se encuentra dividido en dos comisiones: obras públicas y bienestar social. “Trabajamos con distintos proyectos desde una óptica adolescente, desde las problemáticas que hoy vivimos como jóvenes”.
Entre los proyectos hubo varios destacados. Uno de ellos fue el tema de la discriminación que viven en los boliches de la noche sanmartiniana. “A causa de todo eso tuvimos una gran movida, hicimos que se revean las normas de leyes sobre cómo actuar ante un hecho discriminatorio y el consejo deliberante se convirtió en un sitio para denunciar cualquiera de estos hechos”. Además, el grupo tuvo contacto con el Inadi y comenzaron a trabajar en conjunto con todo material diverso. “Empezamos a salir por las calles a concientizar a la gente de que leyes nos protegen ante un hecho discriminatorio, y nos dimos cuenta que no solamente ocurre en el ámbito de jóvenes adolescentes, sino que también en lo laboral; e invade a todas las clases”.
“Nuestra política es institucional, no hacemos política partidaria, militamos de una manera social para el involucramiento de los jóvenes, ya que en el Consejo tenemos un espacio. Además, creamos conciencia respecto a que somos representantes del futuro, pero también de este presente. Por eso tratamos de construir: porque hay muchos jóvenes que creen que la política no tiene que ver con ellos. Naturalizamos los hechos como ver a un chico de nuestra edad que se droga o que deja el secundario, y nosotros tratamos de incentivarlos sobre que este espacio está para crear nuestro futuro y cambiar este presente”