El proyecto se lleva adelante con éxito en algunas ciudades como La Plata y San Miguel, pero su origen está en el Estado de minas Gerais en Brasil. El municipio destina una parte de su presupuesto a obras, los vecinos de cada barrio se dividen por zonas y votan las obras que quieren para su zona. Así de simple.
Lo cierto es que el municipio comenzó a implementar una prueba piloto en Don Bosco pero no institucionalizó la propuesta. Ahora, el sistema tomará forma a través de una ordenanza si e aprueba el proyecto presentado por la concejal oficialista Edith Llanos.
En diálogo con Radio FMQ, Llanos precisó que con esta ordenanza se apunta a que el Ejecutivo cuente con una herramienta más para dar participación directa a los vecinos. Según la concejal, el proyecto apunta a dividir al municipio en pequeñas zonas que serán determinadas en la reglamentación y que serán los lugares donde se realizarán las asambleas de vecinos.