[28/09/2008]
Mario Barrios se pronunció por “una Central cada vez más claramente autónoma”, ya que, "cualquier obsecuencia con el gobierno de turno, nos quitaría razón de ser”.
Mario, de hablar pausado, firme y convincente, dialogó con ACTA extensamente. A continuación, parte del diálogo mantenido con el dirigente de los trabajadores autogestionados:
¿Con qué expectativas participarán de la Constituyente Social que tendrá lugar en Jujuy el 24 y 25 de octubre?
Entendemos que es necesario recrear el Movimiento Nacional a través de consignas claras. El debate debe servir para dejar en claro de qué lado está cada uno. Es fundamental retomar la práctica autónoma de la Central. La CTA debe ser claramente independiente del poder político y económico.
Está reafirmando un principio histórico de la Central.
Claro, la autonomía de los gobiernos, los patrones y los partidos políticos. Autonomía que, por supuesto, no significa neutralidad. El Gobierno tiene sus actitudes, algunos lo definen como un gobierno en disputa. No niego que ha tomado algunas medidas positivas que deben ser reconocidas. Pero al mismo tiempo convengamos que a la hora de los hechos pagó más que ningún otro a los acreedores externos como si fuera un acto de patriotismo, a la par que le niega a los jubilados la deuda histórica que se tiene con ellos.
¿Usted cree que hay que mantener la autonomía para decir lo que el Gobierno hace bien y lo que hace mal de acuerdo a los intereses de los trabajadores?
Usted lo ha dicho. Así de sencillo. El Gobierno puede tener doble discurso, ser contradictorio, la Central de Trabajadores de la Argentina no. Tenemos conducta y una historia de lucha que resguardar.
El debate es válido y existe dentro del campo popular
Por supuesto. Cada compañero puede tener la posición individual que quiera. El tema es que la CTA no se vea confundida con esas posiciones. Y en ese sentido cada uno tiene su responsabilidad. Me parece muy respetable que muchos compañeros tengan fe en este Gobierno, lo que tienen que tener en claro es que no se puede convertir a nuestra Central en un apéndice del partido de gobierno como lo es la Confederación General del Trabajo. Nuestra justificación de vida como construcción de la clase trabajadora es ser la alternativa a una central servil con los gobiernos de turno.
Algunos medios de prensa hegemónicos presentan al encuentro de Jujuy como una oportunidad para repartir candidaturas.
Bueno, no es de extrañar que hagan eso para descalificarnos. Para muchos sectores, política es sinónimo de apetencias individuales, de expresión meramente electoral, donde cuando se debate algún proyecto, no hay otro interés que ocultar que lo colectivo, el bienestar del país y de su gente importa poco.
¿Qué propuesta concreta llevan a Jujuy?
Recién este sábado vamos a discutir en plenario el tema con los compañeros. La idea es llevar un planteo común entre todas las organizaciones de autogestión.
Hay demandas sectoriales que seguramente son indiscutidas.
No hay una política desde el Gobierno hacia la autogestión. Eso se ve en la falta de un marco jurídico que demandamos. Necesitamos también una Ley de Financiamiento, de Expropiaciones, muchas cosas.
¿Las empresas recuperadas, en muchos casos luego de la fuga de sus patrones, y luego autogestionadas por sus trabajadores, pertenecen a una etapa superada del país?
Hay mucha gente sin trabajo, nuevos despedidos y fábricas que cierran. Hemos generado 5000 puestos de trabajo. Hay 200 empresas recuperadas, miles de cooperativas. Somos parte de la pequeña y mediana empresa, que es la que genera empleo a diferencia de las multinacionales que sólo buscan maximizar ganancia sobreexplotando al trabajador.
Acabamos de recibir pedido de asesoramiento de una textil en Tierra del Fuego. También vamos a trabajar en Misiones, más precisamente en El Dorado. En el Chaco debemos enfrentar la reapertura de una hilandería y un frigorífico. Todos los días se cierra una empresa. Si existiera una política clara, muchos más compañeros tendrían otra alternativa que ir a parar a la calle.
Existen 3.600 cooperativas de vivienda. Dan empleo a miles de compañeros. Muchas se están quedando sin las partidas necesarias para seguir funcionando. Trabajo y necesidad de vivienda son centrales en la deuda interna del país. Es lo que habría que atender, y no las deudas con el Club de París, los fondos buitres y todos esos que vinieron a hacerse ricos entre las ruinas del país.
El que habla es Mario Barrios. Más claro, échele agua.
por Carlos Saglul, Agencia CTA
